
Estamos seguro de que has escuchado alguna que otra vez sobre el squirt. Muchas personas piensan que se trata de un mito, de una leyenda que solo ocurre en los vídeos eróticos y que se trata de un mero truco para excitarnos, sin embargo, desde aquí te decimos que es algo que puedes llegar a experimentar y que es una sensación más que agradable, algo que te elevará hasta unas cotas de placer que jamás hubieras pensado alcanzar. Si quieres iniciarte en el squirting o quieres que tu pareja disfrute con su primer squirt, aquí te diremos cómo conseguirlo.
Squirt ¿qué es?
Antes de dar comienzo a nuestra guía para conseguir un squirt, tenemos que dejar claro qué es exactamente este acto, como también dar algunas diferencias para que no haya confusiones. Lo primero de todo, tenemos que aclarar que la eyaculación femenina no es lo mismo que el squirting, por lo que una mujer puede eyacular o tener un orgasmo sin necesidad de producir un squirt. Según los expertos los fluidos tanto de una eyaculación femenina, como del squirting son distintos, tanto en la composición, como también del lugar donde provienen.
Cuando hablamos de eyaculación femenina, nos estamos refiriendo a una sustancia acuosa, con apariencia lechosa que para muchas personas es como una lubricación de la vagina. Como puedes imaginar, a diferencia de la del hombre, cuando las mujeres tienen su orgasmo, este líquido no sale propulsado, sino que se queda dentro del canal vaginal, aunque puede llegar a salir según la postura en la que la mujer se encuentra y también de la cantidad de fluidos que haya producido.
El squirt no proviene por lo tanto de la vagina, sino que se libera por la uretra. El líquido expulsado es transparente, sin olor y aunque muchas mujeres (y hombres) piensan que se trata de un momento en el que las mujeres llegan al orgasmo, no es así y asociar ambos conceptos podría incurrir a error, aunque cada vez son más mujeres las que desean ponerlo en práctica para saber que se siente y por eso en la siguiente parte de este artículo te hablaremos de cómo hacer un squirt para que puedas ponerlo en práctica, ya bien sea en soledad o con tu pareja.
Al hablar de que es liberado por la uretra, hay que aclarar que después de cientos de estudios que se han realizado en diferentes Universidades de gran renombre, lo que se expulsa es una especie de orina diluida, siendo bastante interesante saber que antes de la práctica sexual, la vejiga estaba completamente vacía y que con la estimulación se les llenaba rápidamente.
Pasos para conseguir un squirt
Una vez que hemos realizado la aclaración sobre el squirting y la eyaculación femenina, te queremos contar lo necesario para que puedas ponerlo en práctica. Lo esencial es que puedas relajarte, que no te lo tomes como un objetivo que debes cumplir en una sola sesión, todo lo contrario, quizás algunas personas lo consiguen a la primera, pero lo ideal es que puedas relajarte y disfrutar del momento, que al fin y al cabo es lo que buscamos con este tipo de experiencias sexuales. Si estás obsesionada con logar esta sensación, puede que te pongas nerviosa y que no llegues a excitarte como es debido, haciendo que sea más complicado llegar hasta el punto de que sucede el squirt.
Lo importante para llegar al squirting es que conozcas tu cuerpo a la perfección. La sexualidad femenina como bien sabes, es compleja y cada mujer disfruta de una manera diferente, algunas prefieren estimular el clítoris de una manera, mientras que otras, prefieren más la vagina para sentir mayor excitación. Por este motivo, antes de intentar llegar al squirt, lo que debes tener claro son tus puntos o zonas que más te estimula. Recuerda que la sensación es muy diferente a la del orgasmo, por lo que quizás estás experimentando un squirt sin que sea un clímax total.
La forma más fácil y directa de llegar al squirt es por medio de la excitación del punto G. A diferencia de otras sensaciones, no debe ser algo lento o tranquilo, sino que, cuando sabes exactamente la zona y la forma en la que se te debe estimular, hacerlo rápidamente, con energía obteniendo el máximo placer en el menor tiempo posible. Muchos especialistas en el squirting aseguran que, aunque se puede realizar con las manos y llegar tranquilamente, para aquellas mujeres o parejas que quieren experimentarlo, lo más rápido y eficaz son los juguetes eróticos, puesto que estos conseguirán mayor potencia en la estimulación, sin cansarse ni perder el punto G de vista.
Para que todo marche como debe ser, lo primero que debes de realizar es estimular tu clítoris o el de tu pareja, con esto lo que se consigue es que se el riego sanguíneo crezca y por tanto, sea más fácil tocarlo y manipularlo. Una vez que lo has hecho correctamente, será el momento de introducir el dedo o dedos por la vagina, palpando la zona en la que se encuentra el punto G, sabrás distinguirla porque es una zona rugosa al tacto que, cuando se estimula como es correcto, empezarás a sentir que tienes ganas de orinar, siendo uno de los indicativos que vas por el camino correcto.
Poco a poco las sensaciones y la excitación irán en aumento, por lo que tendrás que presionar algo más fuerte y con más velocidad, aumentando la sensación de orina, una vez que no puedas más verás que disfrutarás de esta gran experiencia sexual.